Castillo de Arena: El alma de Zicatela

El Castillo de Arena es la fusión perfecta entre diseño y naturaleza, el nuevo hotel boutique diseñado por el arquitecto Alberto Kalah y Susana Pantoja, redefine el concepto de hospedaje en la costa oaxaqueña. Con su apertura prevista en diciembre del año anterior 2024, este proyecto ubicado en Punta Zicatela promete ser un ícono de diseño contemporáneo que conecta la arquitectura con el entorno natural.
Ubicado a solo dos cuadras del océano, Castillo de Arena es un homenaje a la tranquilidad de la costa y al esplendor de Oaxaca, pues su diseño compuesto por 3 niveles, evoca la imagen de un castillo enclavado en un entorno selvático. Estas estructuras rodean un patio central, el núcleo del proyecto, donde 2 árboles preservadores del terreno original se alzan como guardianes del espacio, contemplados por un piso de piedra recuperada.
El diseño es totalmente inspirado en la autenticidad oaxaqueña, ya que el enfoque arquitectónico del hotel busca armonizar con su entorno, destacando acabados naturales como piedra y madera. En el interior los detalles reflejan una sensibilidad artesanal única; textiles orgánicos, azulejos hechos a mano y antigüedades curadas por Rene Nieto. Cada habitación invita a una experiencia sensorial que celebra la rica herencia cultural de Oaxaca, mientras que los espacios comunes, como la alberca, conectan de manera íntima con la naturaleza.
La alberca, revestida con delicados azulejos que reflejan la luz del día, está diseñada como una gruta oculta. Este espacio, lleno de serenidad y contemplación, crea un espectáculo visual que refuerza la conexión entre lo natural y lo construido.
Aunque Castillo de Arena no cuenta con restaurante, el café-bar Los Zanate complementa la experiencia. Abierto al público, este rincón íntimo refuerza la esencia comunitaria y relajada del proyecto, invitando tanto a huéspedes como a visitantes a disfrutar de un ambiente cálido y acogedor.
El branding del proyecto, a cargo de Deduce Design, y la construcción liderada por RITJSA, son parte integral de este concepto arquitectónico que trasciende el simple hospedaje. La integración de vegetación autóctona y materiales orgánicos en el diseño no solo embellece el espacio, sino que también crea una sinergia entre el edificio y el paisaje circundante.
El Castillo de Arena es un refugio donde cada detalle, más que un hotel, es un ícono arquitectónico desde los materiales hasta la disposición de los espacios, invita a la contemplación y al descanso. Este proyecto no sólo redefine el diseño costero en Oaxaca, sino que también destaca por su compromiso con el equilibrio entre lo construido y lo natural.
En este espacio no solo se encuentra un lugar para hospedarse, sino también una experiencia que celebra la esencia de Zicatela: un equilibrio perfecto entre lo auténtico, lo artístico y lo natural.