Entre diseño y familia: La historia de Fátima Martínez y Fátima Cuesta, el dúo detrás de “Ikaya”

En entrevista, Fátima Martinez nos abre las puertas de su empresa de decoración y diseño interior, Ikaya, compartiendo los retos, aprendizajes y sueños que las impulsan, resaltando la época navideña como su especialidad y la temporada más fuerte de ventas. Desde sus inicios en Mérida hasta su expansión en la Ciudad de México, nos cuenta cómo su relación con su mamá, Fátima Cuesta, ha sido fundamental para el éxito de su marca. Así como lo que podemos esperar de su nueva colección navideña.
Este dúo madre e hija, ha logrado consolidar Ikaya, una tienda de decoración que mezcla experiencia y frescura en cada proyecto. Lo que comenzó como una mueblería ha evolucionado en un espacio integral de diseño donde sus clientas encuentran no solo accesorios decorativos, sino también asesoría para crear un verdadero hogar. Las fundadoras nos comparten los valores que rigen Ikaya, cómo ha sido trabajar juntas y los planes de expansión que tienen para su negocio.
¿Cómo nació la idea de crear Ikaya? ¿Qué las motivó a incursionar en el mundo de la decoración para el hogar?
Nos mudamos de la Ciudad de México a Mérida, y mi mamá, se dio cuenta de que hacían falta tiendas de decoración; no encontraba lugares para comprar cosas bonitas para la casa. Entonces, hace 12 años decidió abrir Trendy Home. Después, la familia regresó a la Ciudad de México y quisimos crear algo similar pero adaptado a este contexto, y así nació Ikaya.
¿De dónde proviene el nombre “Ikaya”? ¿Qué significado tiene para ustedes y cómo refleja la esencia de su marca?
Ikaya significa “hogar” en zulú, un dialecto africano. Para nosotras, lo más importante es crear un ambiente ameno, bonito y acogedor en las casas de nuestros clientes, y ayudarles a construir un verdadero hogar.
¿Cuáles fueron los mayores retos que enfrentaron al abrir su tienda? ¿Recuerdan algún momento decisivo que las hizo crecer como negocio?
Comenzamos como una mueblería más que una tienda de decoración. Nos dimos cuenta de que los clientes querían algo personalizado y que no vendíamos los muebles en existencia. Entonces, decidimos dividir el concepto y crear Ikaya Design Boutique, que ofrece accesorios de decoración y flores artificiales, e Ikaya Design Solutions, con proyectos de interiorismo a la medida. Este cambio nos ayudó mucho a crecer como negocio y entender lo que buscaban nuestros clientes.
¿Cómo es la dinámica de trabajar como madre e hija? ¿De qué manera creen que esta relación ha influido en el éxito de Ikaya?
Ha sido increíble. Nos complementamos muy bien: Fátima, mi mamá, aporta años de experiencia laboral, y yo, la hija, sumo ideas frescas e innovadoras. Somos el equipo perfecto y no dejamos de aprender una de la otra todos los días.


¿Cómo se dividen las responsabilidades dentro de la tienda? ¿Tienen roles definidos o se complementan en todas las áreas?
Mi mamá está más involucrada en los proyectos de interiorismo, que es lo que más le apasiona, mientras que yo me encargo de la tienda física y de los proyectos de ambientación y styling con plantas artificiales.
Para esta temporada navideña, ¿qué podemos esperar de su nueva colección?
Tenemos artículos para todos los gustos. Los conceptos están diseñados para que puedas elegir una temática y lograr que tus espacios decorados luzcan increíbles.
¿Qué fuentes de inspiración tomaron en cuenta para las tendencias navideñas de este año? ¿Qué elementos clave consideran imprescindibles en la decoración de fin de año?
Trabajamos con un año de anticipación en cada colección y seguimos tendencias globales. Este año están muy en tendencia los tonos naturales, el verde en diversas combinaciones y el uso de listón en guías, coronas y el árbol.



¿Cómo ha evolucionado Ikaya para mantenerse relevante en un mercado tan cambiante? ¿Han notado algún cambio en las preferencias de sus clientes desde que abrieron?
Cada día los clientes buscan sentirse más conectados con la marca. Nuestro servicio al cliente personalizado es clave; intentamos conectar con ellos para entender sus necesidades y asesorarlos con diseño acorde a su estilo y gusto.
En su opinión, ¿cuáles han sido las claves del éxito de Ikaya hasta ahora? ¿Qué valores y principios rigen su marca?
La constancia ha sido fundamental. Nos ha costado llegar a donde estamos, pero creemos que la pasión por lo que hacemos y el esfuerzo diario son claves para el éxito. Aún tenemos grandes metas, queremos llegar a más clientes, más estados y hasta otros países.
¿Cómo describen la relación que tienen con sus clientes? ¿Qué buscan transmitir a través de los productos que ofrecen?
Al trabajar en el hogar de un cliente, establecemos una conexión más profunda que lo meramente laboral. Mi mamá, Fátima, ha creado muchas amistades a través de estos proyectos, ¡ha sido increíble!
¿Hacia dónde ven evolucionando Ikaya en los próximos años? ¿Tienen planes de expansión o nuevas propuestas para sus clientes?
Nuestro fuerte es la temporada navideña, y queremos seguir creciendo a través de las ventas en línea, incluso a otros países, con productos fabricados por nosotros. En cuanto a expansión, estamos trabajando para abrir Ikaya en San Antonio, Texas, en los próximos años.